EUROPA
PRESS
28 octubre
2019
Jubilarse
no implica acudir más a menudo al médico
La jubilación no implica un aumento de
las visitas al médico y del uso de los recursos sanitarios, en contra de lo que
se suele pensar, según un estudio que buscaba relacionar el estado de salud y
el uso de recursos sanitarios en la población de entre 55 y 75 años, es decir,
entre jubilados y personas que aún se encuentran en edad activa.
Concretamente, aunque la longevidad lleve consigo problemas
relacionados con el aparato locomotor, la hipertensión, problemas de visión o
con la actividad sexual, en la investigación, llevada a cabo por Vivaz Seguros
de Salud, la Universidad Francisco de Vitoria y el Instituto Carlos III, se
refleja que el fin de la etapa laboral no aumenta la visita a especialistas
como el psiquiatra, que se mantienen al mismo nivel que antes de la jubilación.
Asimismo, disminuye la asistencia al psicólogo en un 62 por ciento, se reducen
también las visitas al fisioterapia en un 29 por ciento y, además, también
disminuye la necesidad de rehabilitación en un 37 por ciento.
No obstante, el estudio concluye que las personas jubiladas
hacen un mayor uso de los servicios de enfermería (un 36% más que las no
jubiladas), lo que responde, según ha señalado el presidente de la Sociedad
Española de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad, el doctor Manuel
Castillo, a una "mayor preocupación por la prevención".
En este sentido, los españoles de 65 a 75 años se vacunan
contra la gripe en mucha mayor medida que antes de jubilarse (119%), se hacen
chequeos médicos más frecuentemente (9%) y se hacen más pruebas que facilitan
la detección precoz del cáncer (44%). Además, tras el cese de la vida laboral,
se produce un aumento significativo de analíticas (10%), ecografías (20%) y
radiografías (28%).
Con todo, pese a no producirse un incremento del uso del
SNS, la mayoría de los encuestados reclaman más coberturas relacionadas con los
problemas de salud de la vejez. Las más demandadas son el dentista (86%), las
operaciones de vista (52%), las gafas y lentillas (51%) y el podólogo (45%).
Pero este colectivo también presenta problemas específicos.
Los ciudadanos de 65 a 75 años suelen medicarse más que las personas próximas a la jubilación (21%). En muchos casos, esta
tendencia lleva a la polimedicación (consumir 5
medicamentos o más al día), que se incrementa un 107% tras dejar de trabajar,
aunque, tal y como se ha señalado, esto tiene una función más preventiva que
terapéutica, ya que estos medicamentos generalmente son para evitar factores de
riesgo como el colesterol o la hipertensión.
Menos depresión
El estudio, cuyos datos se han obtenido a través de una
muestra de 1700 entrevistas entre trabajadores y jubilados, también rompe con
el estigma de que el fin de la vida laboral implica un aumento de la depresión.
Así, el porcentaje de españoles de 55 a 64 años que presenta síntomas
depresivos es un 27% mayor que el de los ciudadanos de 65 a 75 años.
Esto podría ser consecuencia de un cambio favorable en el
estilo de vida de estas personas. El estrés y el sedentarismo que caracterizan
a la época inmediatamente anterior a la jubilación se dejan de lado para
adoptar unos hábitos de vida mucho más saludables.
De hecho, el porcentaje de españoles de 65 a 75 años que
realiza ejercicio de forma regular aumenta un 28 por ciento respecto a los 10
años previos al retiro. Además, se sigue la dieta mediterránea con más
asiduidad (12%), se fuma y se bebe mucho menos (disminución de un 61% y del 6%,
respectivamente) y se está más satisfecho con la vida social en general (9%).
Tal y como ha señalado Castillo, lo inédito de la situación
de los jubilados en la actualidad es que "tantas personas gocen de tan
buen estado de salud" debido a un "aumento de la prevención y a los
avances tecnológicos". En este sentido, también ha querido destacar que se
trata de "una generación que no solo es la más longeva de la historia,
sino que además goza de una mayor calidad de vida; son muy activos, se apoyan
en la tecnología, poseen una gran capacidad de disfrute de la vida y, en
general, suelen estar más concienciados con su salud tras la jubilación".
"En definitiva, es la generación que va a disfrutar de la jubilación con
júbilo", ha concluido.